RELACIÓN INDIVIDUO COLECTIVO ( Taller)

Este taller, realizado por una miembro de Lakave, consistió en reflexionar
sobre los problemas que los proyectos grupales pueden tener en relación
con sus integrantes. Una buena gestión de los conflictos personales es clave
para la supervivencia de un trabajo colectivo duradero.
En un proyecto grupal sería necesario que el objetivo común estuviese por
encima de los objetivos individuales pero también es vital que los individuos
sintiéndose parte del proyecto, dispongan de su propio espacio para
realizarse como personas.
El bienestar de los individuos es fundamental para el proyecto común. Las
frustraciones, la sensación de desplazamiento así como otros conflictos
personales se proyectan en el grupo y lo deterioran. Es por tanto necesaria
una comunicación sencilla y fluida y no tanto evitar el conflicto como
gestionarlo de manera positiva. La gestión de emociones es por
consiguiente vital y es conveniente no calificarlas como positivas o
negativas. Por ello analizamos distintas emociones, causas e implicaciones y
como podrían utilizarse en nuestro beneficio y de la comunidad.
Se recomendó aceptación de los límites de comunicación y relación,
respetar si alguien prefiere cerrar el canal de comunicación en algún
momento, utilizar el sentido del humor para gestionar algunas situaciones y
permitir que las emociones nos guíen en lo colectivo y personal a modo de
instinto. También tomar consciencia de que somos los principales
responsables de nuestras emociones y que si existe malestar, es nuestra
responsabilidad trabajarlas y evitar proyectar y culpabilizar de estos
sentimientos al grupo.
Se dividieron las posibles formas de relación en igualdad o dominación.
Igualdad entendida como equilibrio entre las personas. Ante una relación de
patente dominación podría tratarse de equilibrar la misma o terminar la
relación.
Acabamos la actividad con una dinámica por grupos en la que compartimos
conflictos emocionales pasados e intentamos analizar sus causas y posibles
soluciones.